lunes, 23 de diciembre de 2013

¿Vegano?. No, gracias.

Antecedentes

Antes de exponer mi opinión sobre este tema, me gustaría aclarar una serie de cuestiones. Me considero, modestia aparte, una persona bastante liberal en todos los aspectos: tanto me da si uno quiere alimentarse a base de coles de Bruselas, como si quiere hacerlo a base de criadillas de búfalo o de alas de mosca de la fruta. También me da igual si uno quiere montárselo a solas o en compañía, si la compañía es masculina o femenina, o masculina los días pares y femenina los impares; si quiere adorar a Dios, a Mahoma, a Justin Bieber o no adorar a nadie; si le gustan los toros, el fútbol o el baloncesto, si quiere esnifar coca o pastillas de Starlux, si es de ciencias o de letras,... y así podría alargar la lista ad infinitum.

Y lo mismo que no creo que ninguna de mis elecciones sea moral y éticamente superior a la que pueda tomar otra persona, tampoco acepto que nadie me diga que es más ético ser heterosexual que ser célibe, homosexual o bisexual.

La lógica es otra cosa. Acepto que alguien se proclame católico, apostólico y romano, pero me jode que a continuación afirme que él no cree en los curas. No hablo ni de hipócritas ni de hipocresía. Hablo de gente que, sinceramente, es capaz de creerse, y aceptar como propias, dos actitudes contradictorias simultánemente.

Acerca de mi

Desde que tengo uso de razón ha habido animales en mi casa: gatos, perros, canarios, hámsters,... Desde que tengo uso razón jamás me han gustado los animales. De hecho, la única forma que soporto a un bicho, es a la brasa y poco hecho. También he de confesar que no los odio, y que nunca, salvo siendo niño, cuando me divertía volando hormigueros con petardos o torturando algún que otro saltamontes arrancándole las patas, he disfrutado maltratándoles. A mí los animales me han resultado totalmente indiferentes: ni les he odiado, ni les he amado.

Creo firmemente en que el hombre es el rey de la creación, que los animales están para nuestro uso y disfrute y hasta que me encuentre con una cebra que sea capaz de escribir no ya el Quijote, sino algo tan simple como lo que están leyendo Uds. ahora, me niego a tratarles de igual a igual como si fueran humanos. Me importa una mi*rd* que para dar con la vacuna de la polio tuvieran que ser viviseccionados cientos o miles de monos, porque para mí evitar la parálisis de un solo niño tiene más valor que la vida de cualquier simio. Y si Ud. opina lo contrario, sea coherente y no vacune a sus hijos contra la polio.

Para compensar, también de siempre, me han gustado los niños y he disfrutado (y disfruto con ellos). Siempre me ha sorprendido ver a padres que son incapaces de jugar cinco minutos con sus hijos y luego se pasan las horas muertas tirándole un puto palito al chucho o a madres que no le hacen la más mínima caricia a sus hijos y luego se les cae la baba cuando su perrito/gatito se duerme en su regazo.

Ahora bien, de acuerdo a lo que dije en el primer párrafo, en ningún caso me creo superior moralmente a ellos, ni se me ocurriría afearles en modo alguno su comportamiento. Bastante tengo yo con lidiar con mi conciencia, para ponerme a lidiar con la conciencia de los demás.

Justificación

Y en éstas aquí estoy metido por un quítame allá esos filetes con Ätman surgido a raíz de un post de Miroslav y los correspondientes comentarios.

Y ahora si más dilación...

La Entrada

Es conocida por películas y series de televisión la figura de personajes que armados de una Biblia y un crucifijo se dedican a propagar la palabra de Dios, amenazando de paso con el peor de los infiernos, a todos aquellos que no osen convertirse. Ellos se definen así mismo como el instrumento de la ira de Dios, por lo que están legitimados a, llegado el caso, a meterte un crucifijo por salva sea la parte sin con ello consiguen tu salvación. De nuevo insisto que me parecen muy bien sus creencias, siempre y cuando a mí no me den por c*l* y no me lleven su intolerancia y sus creencias al ámbito de la razón. Junto a éstos yo incluyo a aquellos veganos, vegetarianos, defensores de los animales que armados con una zanahoria no hacen más menospreciar a aquellos que, siguiendo el dictado de la naturaleza que Dña. Evolución tuvo a bien conferirnos, somos omnívoros y disfrutamos de un chuletón de buey a la brasa, churruscado por fuera y sangrante por dentro.

De nuevo insisto en que si quieren alimentarse a base de brócoli me parece perfecto pero, como en el caso anterior, que conmigo no hagan proselitismo y que no me lleven su intolerancia y sus creencias al ámbito de la razón, porque como buenos fanáticos, son como agujeros negros y no dejan que la luz de la razón salga de ellos.

Es fácil verlo, a cualquier pregunta que les hagas y les resulte incómoda o no sepan contestar, su argumento es siempre el mismo: "Es la voluntad de Dios", los primeros, o "eso es tan evidentes que no voy a contestarlo", los segundos; cuando lo único que es evidente es su falta de racionalidad.

Vamos a ver alguna incongruencias de esta gente.

Dicen defender los derechos de los animales, pero ¿de cuáles?. ¿Por qué un toro tiene más derechos que una hormiga? Por ejemplo, no dudan en matar una cucaracha, pero les repugna la idea de meter un bogavante en agua hirviendo para luego comérselo, y hasta donde sé tan artrópodo es el uno como el otro. ¿Es lícito comer hormigas? ¿Por qué nadie se opone a las trampas para palomas diseminadas por los tejados en todas las ciudades? ¿Por qué no solo nadie se opone si no que además exige campañas de desratización y desinsectación? ¿Aceptaría ir a un restaurante vegetariano con cucarachas y ratas correteando entre sus pies?

De acuerdo, vivamos solo a base de soja, pero recuerde que las tierras de cultivo se consiguen a costa del bosque, lo que conlleva la destrucción de plantas y animales. No sé cuántas especies se habrán extinguido como consecuencia de la desaparición de su hábitat natural, pero me temo que habrá más de una.

Seguro que Lansky tiene mucho más que decir al respecto

De manera que yo soy un hijo de puta por sacrificar una ternera para comérmela, pero tú no lo eres por cargarte el hábitat natural del somormujo para ponerte ciego a calabacines.

Luego están los animales domésticos. ¿A Ud. le gustaría que le castrasen?. Pues a cientos de gatos se les castra sin su consentimiento informado... ¿Alguien le ha preguntado alguna vez a un caballo si quiere tirar de un carro? ¿O a un perro si quiere jugarse la vida peleando contra un lobo para proteger a unas ovejas? ¿Y por qué c*j*n*s no va a tener derecho el lobo a comer oveja?


En Resumen

A esta gente, como dije en un comentario al post de Miroslav los llevaría mucho mejor si fuesen sinceros consigo mismos y se llamasen Defensores de los derechos de aquellos animales que a MÍ no me dan por c*l*. En consecuencia me gustaría saber qué animales son los que tienen derechos y por qué.

Y que le quede bien claro que el alimentarse a base de lechuga no le hace a nadie ser mejor persona. ¡¡ A Ud. TAMPOCO !!

Colofón

Si Ud. es vegano, vegetariano, defensor de los animales o lo que sea, y no se dedica hacer proselitismo ni a despreciar a los demás, ni que decir tiene que este post no va con Ud.